El Biomagnetismo es el estudio del efecto de campos magnéticos en sistemas biológicos, es decir sobre organismos vivos, y por tanto sobre nuestra salud. La energía biomagnética es nuestra fuerza de vida, tanto como lo es el aire, el agua y la luz del sol.
De acuerdo en el Dr. Payne,
algunos de los efectos que producen los campos magnéticos en los organismos
vivos son los siguientes:
Incremento de flujo sanguíneo y
mejora de la capacidad de transportar oxígeno, facilitando la recuperación y
mantenimiento de la salud.
Cambios en la migración de los
iones de calcio, que proporcionan calcio a los huesos. Se modifica el pH de los
líquidos.
Se incrementa la producción de
hormonas de las glándulas endocrinas.
Diferentes Efectos de los Polos
de un Imán Permanente.
A cada uno de los polos de un
imán permanente le corresponde una forma de energía magnética distinta, y por
tanto sus efectos son distintos. El polo norte significa detención, relajación,
y el polo sur avance, acelera, da vida y energía.
El polo Norte ( - ): El polo
Norte de un imán permanente produce una reducción del contenido ácido, detiene
las infecciones, ayuda a cerrar heridas y aliviar distintas dolencias que
desaparecen sin dejar efectos secundarios. En el polo Norte de un imán
permanente, tenemos un remolino de electrones girando en sentido contrario a
las agujas del reloj, con una carga magnética negativa.
El polo Sur ( + ): El polo
Sur de un imán transmite energía y vigor a los organismos vivos, refuerza los
componentes ácidos, estimulando la producción de proteínas, y acelera el
proceso de maduración. En el polo Sur de un imán hay un remolino de electrones
que gira en el sentido de las agujas del reloj, con una carga magnética
positiva.
Los campos magnéticos afectan la
circulación de la sangre, que contiene hemoglobina y hierro ( la sangre es de
color rojo debido al hierro, el hierro con oxígeno, oxidado, es de color rojo
). Sin el hierro no hay energía, y sin energía se detienen el latido del
corazón y la respiración, por lo que el hierro es esencial para la vida, y la
influencia de un campo magnético sobre el hierro es considerable e indiscutible.
Los campos magnéticos producen una pequeña corriente eléctrica debajo de la
piel, lo suficientemente fuerte como para causar efectos biológicos como son:
la reducción de dolor, la regeneración de células y nervios, etc..
Un campo magnético atrae y repele
las partículas cargadas de la sangre, creando movimiento y calor. Esto dilata
los vasos sanguíneos, incrementando la circulación de la sangre y acelerando
los procesos de curación y de recuperación. El insomnio responde rápida y
eficazmente a la aplicación de un imán sin necesidad de medicación alguna. Los
dolores de muelas se alivian aplicando el polo Norte de un imán sobre la
mejilla dolorida. Los dolores producidos por heridas también se pueden aliviar
mediante la aplicación de un imán permanente. El imán resulta muy eficaz en
algunos casos de epilepsia y reduce el número de ataques del paciente. También
pueden aplicarse imánes permanentes en los ojos: el polo Norte le puede ayudar
en algunos casos de cataratas precoces, inflamaciones de los ojos, vista
cansada, etc..
Incluso para la sordera pueden
ser muy útil la aplicación de imanes permanentes. Aplicación directa. La forma
más sencilla de aplicación de la magnetoterapia o imanterapia consiste en
aplicar el imán directamente sobre la zona a tratar, teniendo especialmente
cuidad en seleccionar el polo adecuado. Normalmente en MagnetoTerapia se aplica
el polo NORTE (-) de un imán directamente sobre la zona a tratar, aunque en
algunos casos se utiliza el polo SUR (+). Magnetización de líquidos.
Según Roy Davis, el tratamiento
del agua potable con campos magnéticos potencia la actividad iónica del
hidrógeno del agua, y puede utilizarse para estimular la actividad mental,
además de producir un efecto calmante, neutralizando las situaciones
estresantes (tensión muscular, hipertensión arterial, palpitaciones, cefaleas,
insomnio, irritabilidad, etc..).
Si se mantiene el polo Norte de
un imán sumergido durante unos minutos en un vaso de agua y acto seguido
medimos su pH, podremos observar que éste es alcalino; en cambio, si sumergimos
el polo Sur hará que el agua se vuelva ligeramente ácida. Es decir, los efectos
del campo magnético varían en función de la polaridad aplicada. El pH del agua
puede cambiar de 7 a 9'2 mediante su exposición a un campo magnético de 7000
gauss. Además de modificar la temperatura, tensión superficial, viscosidad y la
conductividad eléctrica. Aunque el agua magnetizada no conserva sus propiedades
magnéticas como una barra de hierro, la ingestión de agua magnetizada modifica
la polaridad de los átomos del cuerpo, especialmente los de hidrógeno, que
tienen un protón (positivo) y un electrón (negativo). Se modifica el eje de
rotación y la órbita del electrón, cambiando su polaridad. Esto le proporciona
un sabor a agua de lluvia, al mismo tiempo, que reduce el sabor a cloro y a
flúor. El agua magnetizada también produce efectos positivos en los órganos digestivos
y urinarios, en los nervios, en la presión de la sangre, ayuda a desbloquear
arterias y normaliza el sistema circulatorio. No es necesario que el imán esté
en contacto con el agua que se pretende imantar, puede colocarse en el exterior
de un recipiente de cristal, cerámica, cobre o aluminio (nunca de un material
que se magnetice, como el hierro). No se aconseja tener elementos magnetizables
cerca del campo magnético (como los cubiertos metálicos). Retirar el imán antes
de introducir una cuchara en el recipiente y/o retirar la cuchara antes de
colocar el imán. Si la cuchara es de madera, de plástico o de cualquier
material que no se magnetice no es necesario retirarla.
Beneficios de la ingestión de
Agua Magnetizada: Mejor gusto. Reduce la acidez y ayuda a regular el pH del
cuerpo. Produce efectos terapéuticos en el cuerpo, especialmente en los
sistemas: digestivo, nervioso y urinario. Ayuda a limpiar arterias bloqueadas,
normaliza el sistema circulatorio y la función de regulación de temperatura. Es
beneficiosa para problemas de riñón, gota, obesidad, y envejecimiento
prematuro. Estimula la actividad cerebral. Facilita la relajación y el bien
estar. Proporciona más salud y vitalidad. El agua magnetizada con el polo Sur
tiene una tensión superficial menor que el agua magnetizada con el polo Norte.
Además el agua magnetizada con el polo Sur, proporciona energía y vitalidad. El
agua magnetizada con el polo Norte acelera los procesos curativos y relaja. La
leche, se conserva fresca más tiempo si se mantiene dentro de un campo
magnético de polaridad Norte; en cambio, si se expone al polo Sur se agriará a
mayor velocidad. También se pueden magnetizar la leche con el polo Sur de un
imán durante media hora, para tomarla seguidamente, proporcionando vigor y vitalidad
a personas débiles y cansadas. Los zumos de fruta pueden magnetizarse para
aumentar su poder refrescante y nutritivo. Hay que tener en cuenta que la
ingestión de agua magnetizada no produce efectos inmediatos, su acción es lenta
y continuada.
Normalmente se empiezan a notar
sus efectos a partir de los dos o tres semanas del inicio su ingestión. Las
aguas con gran cantidad de sales disueltas, se denominan "aguas
duras", tienen un menor poder disolvente, producen menos espuma con
jabones y detergentes, y los alimentos necesitan más tiempo para cocerse. Las
aguas con poca cantidad de sales se denominan "aguas blandas", tienen
un mayor poder disolvente. La forma más sencilla de obtener un magnetizador de
líquidos, es simplemente obtener un imán permanente en forma de disco de
ferrita de las dimensiones adecuadas y colocarlo debajo de un vaso que contenga
el líquido que deseamos magnetizar, y beber normalmente durante las comidas.
Simplemente dejaremos el vaso sobre el imán con el polo adecuado hacia arriba
en lugar de dejarlo sobre la mesa, como si de un posavasos se tratara.
Biomagnetismo en agricultura.
La fruta, las verduras, etc. se
conservan frescas más tiempo si se mantienen dentro de un campo magnético de
polaridad Norte; en cambio, si se exponen al polo Sur madurarán más
rápidamente. Las semillas sembradas en campos magnéticos mostraron curvas de
crecimiento significativas. Se ha observado que bajo la influencia del polo
Norte las plantas crecen altas y delgadas, mientras que bajo la influencia del
polo Sur crecen más cortas y gruesas. Los plátanos regados con agua imantada
con energía del polo Sur se hacen más gruesos y dulces, mientras que los
regados con agua imantada con el polo Norte son más delgados y verdes. Los
científicos sospechan que el campo magnético de la Tierra activa en frutas y
verduras un sistema de enzimas que produce su maduración natural. Los tomates
en el interior de un campo magnético maduran de cuatro a seis veces más
rápidamente. El magnetismo hace también que las semillas germinen a varias
veces su velocidad normal.
EL VITIC. Una Barra de Carbón y
un Imán.
Un científico inglés interesado
en la Egiptología (A.E. Baines) fue el primero en advertir que algunas estatuas
sostenían una varilla en cada mano. Tras varios años de investigaciones llegó a
la conclusión de que se trataba de una barra de carbón y de un imán. Baines
escribe: "El carbón duro tal como se utiliza en las lámparas de arco
libera cierta cantidad de energía que, hasta donde alcanza nuestra experiencia,
es imposible de distinguir de la energía nerviosa. Si se trata del carbón al
que se ha modificado violentamente su estructura molecular hasta hacerle
adquirir un elevado grado de dureza, genera una energía considerablemente
mayor". Dr. Wilson escribía en el "Medical Times" del 25 de
julio de 1914:" Esta forma de energía devuelve las corrientes nerviosas a
la normalidad. Cuando se sujeta con la mano derecha, la barra actúa como un
estimulante sin ningún efecto secundario posterior; en la mano izquierda, actúa
como un sedante. Dichos efectos estimulantes por lo general son beneficiosos
para el sistema nervioso: la fatiga mental desaparece rápidamente, y también
los estados mórbidos, como la neurastenia y la debilidad de corazón".
Aplicado en el lado izquierdo, el magnetismo estimula la actividad del corazón,
mientras que en el lado derecho lo sosiega. El efecto dura en tanto se mantiene
el imán en contacto con el cuerpo y cesa en cuanto se retira. Según Mark L.
Gallert: "Las personas sensibles suelen sentir un ligero hormigueo cuando
sostienen las barras. En cambio, otras personas no sienten nada, lo que no
impide que el tratamiento también haga efecto."
Cuando aumenta el campo
magnético, las bacterias del intestino humano se multiplican rápidamente. Hay
gérmenes que desarrollan una enorme resistencia a los antibióticos mientras que
otros se hacen mil veces más vulnerables. Se ha observado que los seres humanos
que trabajan en las proximidades de imanes artificiales muy potentes
experimentan pérdidas de memoria y que la exposición del cerebro humano a
campos magnéticos poco intensos durante unos minutos al día aumenta
sensiblemente la actividad cerebral.
Hay investigaciones espaciales
recientes que indican que es posible que los seres humanos estemos
condicionados por fuerzas magnéticas procedentes de más allá de nuestro Sol.
Tanto las plagas que atacan los cultivos agrícolas como la abundancia de las
cosechas están directamente relacionadas con fuerzas magnéticas estrechamente
dependientes de fenómenos cósmicos que tienen lugar en la inmediaciones del
espacio, a enorme distancia de la Tierra. Se ha descubierto que la polaridad
correcta del cuerpo es la siguiente: el lado izquierdo es negativo, el derecho
es positivo y el centro es neutro, tanto delante como detrás, hasta que
llegamos al entrecejo, desde aquí hacia arriba parece que es positivo.
Se ha demostrado que es posible
alargar la vida de ratones, ratas, conejos y otros animales, cuando estos viven
cerca de campos magnéticos constantes.
Se ha demostrado que es posible
disolver el calcio y detener ciertos tipos de cáncer mediante imanes, con los
que se puede aumentar la capacidad de regeneración del organismo y ayudar al
desarrollo del hueso y de la materia fibrosa cálcica del mismo. Los campos
electromagnéticos, estimulan el desarrollo del hueso, aceleran la cicatrización
de las fracturas y reducen el dolor producido por la presión de los fragmentos
de hueso astillado sobre los nervios. Como sistemas electromagnéticos, nuestros
cuerpos existen en equilibrio entre y bajo la influencia de fuerzas magnéticas
positivas y negativas.
La corteza terrestre ejerce un
poderoso campo magnético negativo, aunque durante el día experimentamos un
fuerza positiva procedente del Sol. Por la noche el campo magnético negativo de
la Tierra incrementa el oxígeno de las células, facilitando el sueño, la
curación, reduciendo las inflamaciones.
En la antigua Grecia, Aristóteles
fue la primera persona que habló de las propiedades terapéuticas de un imán
natural. Aunque otras muchas civilizaciones antiguas incluyendo Hebreos,
Arabes, Indios, Egipcios y Chinos, utilizaban imanes para la curación de
enfermedades. En la NASA conoce la importancia de los campos magnéticos sobre
la salud, solucionaron una gran incidencia en enfermedades y pérdidas de
densidad ósea de los astronautas, colocando imanes permanentes en los trajes y
en la nave. Los imanes trabajan con le mismo principio que la acupuntura,
equilibrando el flujo de energía, pero sin la utilización de agujas.